Adiós

Antes de irme quiero que sepas que te quedas con la niña inocente que moría de ganas de amar. Te dejo la niña transparente y llena de sueños. Se queda la enamorada del amor y la que podía soportarlo todo. Aquí contigo estará por siempre la niña insegura que sólo al escucharte decirlo se sentía bonita. Encerrada en un cajón, debajo de la cama que un día también fue tuya, la dejo. 

Se va conmigo únicamente la mujer que no tiene miedo. La que terminó y empezó tantas veces desde cero. Se viene acá la que no tiene miedo a estar sola y que te dejó ir el día que la rompiste. Se va conmigo el alma libre que había estado cautiva desde el primer día que te besó. Ella se viene acá porque ya no te tiene miedo. Ya no tiene miedo de verte enojado o lleno de celos. Ya no le importa que tanto la amaste o cuánto la mantuviste encerrada. Me acompaña la mujer que se rehusaba a ser la muñequita de aparador que nadie toca. Se va conmigo la escritora, la que siempre quiso odiarte y sólo le alcanzó para escribirte mil cartas de llenas de amor y rabia de no tenerte. Se viene la mujer que un día te dijo no más y cumplió su promesa. Se va la mujer que no teme y no te necesita para sentirse segura.

Es justo en el momento exacto. No me importa que todos digan que te di más de lo que jamás podría recuperar. No me interesa cobrarte todo eso que di y nunca correspondiste. Es ahora cuando puedo ser la persona que siempre tuve miedo de ser porque te podía perder. La verdad es que nunca te tuve. La verdad es que hoy, no tengo nada que perder.